Pólvora, ¿tradición o sentencia de muerte?

 

Hoy es el último día del año, y al igual que el 1 de diciembre a las 12:00 am, el Valle de Aburrá escuchará y verá como la pólvora hace eco durante la madrugada; algunos lo toman como una tradición de cada año difícil de erradicar, otros a su vez, lo ven como algo negativo que afecta a la fauna en general; aunque sin duda alguna, habrá algunos que la mirarán con terror, al recordar cómo perdieron alguna parte de su cuerpo a causa de una explosión o quemadura durante una festividad, y en algunos casos, muchos de ellos solo observaban o pasaban por el lugar. La alborada, que ya es tradición en Antioquia y la despedida de fin de año, tiende a ser los días que más tasas de quemados registra durante el mes de diciembre, muchos le adjudican esta tradición a los grupos delincuenciales y paramilitares que hicieron popular esta práctica en los años 90´s.

Con lo anterior me surge justamente la pregunta que tiene como título esta columna, realmente es una tradición, o más allá de eso es una sentencia de muerte, y aunque usualmente las personas lesionadas no fallecen, tienden a morir otras cosas, su autoestima, su alegría, quizá sus sueños, simplemente sus vidas cambian de manera radical y sin duda alguna, nada será como antes para ellos. Cada año las autoridades realizan campañas para hacerle un llamado a la comunidad sobre los peligros de manipular pirotecnia, sin embargo, en nada cambia, todo sigue igual, los que siempre la han usado y no les ha pasado nada, creen que son expertos y no dimensionan el daño que puede causarle a otros, quienes no la manipula, pero la observan y tampoco les ha pasado nada, callan y como muchas cosas en este país, “mientras no sea conmigo, mejor no meterse”: pero, quienes les amputaron una parte de su cuerpo, o quedaron con quemaduras y secuelas o aquellos que han visto sus mascotas esconderse asustadas o convulsionando, sufren cada diciembre; y para ellos, es un hecho que la pólvora se les ha convertido en una sentencia de muerte, que con su sonido característico asemejan a las balas, pero en este caso en vez de ser una muerte física, ese sonido es la sentencia de muerte a su tranquilidad.

Según el boletín #33 enviado por la Gobernación de Antioquia muestra que hasta hoy 31 de diciembre del 2024, hay un total 112 casos de personas lesionadas por pólvora, un 4,7% más que en el 2023; esto muestra que hasta ahora, “la tradición” es mucho más importante que esa “sentencia de muerte” de la que he hablado; ahora bien, ¿es posible que a las autoridades les haga falta mayor contundencia con el uso de la pólvora?, o simplemente debemos aguantarnos y cuidarnos de quienes de manera irresponsable y egoísta festejan sin importarle lo que le pasa a los otros, hasta que, y esperaría uno no fuera el caso, les toque a ellos hacer parte de los sentenciados. Mañana sabremos si el año cerró con más casos o menos que el 2023, aunque lo que sí es verdad, es que, para muchos, por ahora, para 112 personas, este año sus vidas les cambió completamente.

Siempre es posible tomar conciencia y cambiar las cosas, cuida a las personas que más quieres y evita a toda costa el uso de la pólvora, evita ser el verdugo que sentencie a otros, simplemente porque es una “tradición”.

Por: Willow Toro