Federico Gutiérrez, ha revelado que la ciudad enfrenta un déficit fiscal de $3,2 billones. Según Gutiérrez, la administración actual tiene una desfinanciación de $2,86 billones en proyectos y programas que requieren recursos para operar con normalidad el próximo año. Además, hay un déficit de $412 mil millones en entidades del conglomerado público que tienen pérdidas acumuladas y/o necesidades de recursos para su operación.
En un tercer balance del empalme con la administración saliente, Gutiérrez expresó su preocupación por lo que se ha encontrado en diferentes entidades y dependencias. Destacó que Metroparques, una de las entidades más cuestionadas, sólo permitió que se diera una reunión entre ambos equipos y se negó a propiciar nuevos encuentros.
Gutiérrez reiteró la preocupación colectiva por la prestación del servicio en entidades de salud como el Hospital General, Metrosalud y el Hospital Infantil Concejo de Medellín. Advirtió que, por ley, no le es permitido cambiar a quienes hoy ocupan cargos directivos y han sido cuestionados por sus manejos administrativos hasta el mes de marzo.
Además, Gutiérrez expresó su preocupación por temas de infraestructura como el Metro de La 80, que está desfinanciado en $1,1 billones y no cumpliría con la fórmula establecida en la Ley de Metros. La gestión predial también tiene retrasos, en promedio, de un año.
Finalmente, Gutiérrez destacó que la línea ética activada por su equipo ha recibido más de 120 denuncias anónimas sobre presunta corrupción y presuntas irregularidades al interior del conglomerado. A pesar de este difícil panorama, Gutiérrez concluyó con un mensaje de optimismo, afirmando que su equipo está trabajando para resolver los problemas y cubrir las necesidades sociales.